Mini Stories to Learn Spanish
Ep 21: Gruñón
La familia Hernández vive cerca del campo. Viven en una casa mediana y modesta con mucha naturaleza alrededor. Es un área rural con hierba, plantas, árboles y animales silvestres. Las casas no están cerca entre ellas. Hay una casa aquí, otra casa allá, otra casa a lo lejos. Es un pueblo chico en donde hay una población pequeña en medio de la naturaleza. Es un pueblo pequeño en donde la gente se conoce y se lleva bien.
La familia tiene tres gatos en su casa. La gata de uno de los vecinos dio a luz a varios gatitos y la familia adoptó a los tres gatos cuando eran pequeños, pero ahora ya son gatos adultos. Los gatos se llaman Canelo, Tigrillo y Gruñón.
Canelo es un gato dulce, tierno y juguetón. Se llama Canelo porque es un gato de color café claro y también gracias a un trozo de canela. Cuando Canelo era un gatito, cuando tenía solo dos meses de nacido, un día jugaba y mordía un trozo de canela que estaba en el piso y al gatito parecía gustarle el sabor de la canela. De vez en cuando, le daban un trozo de canela y al gatito le gustaba morderlo y jugar con aquel trozo. Parecía reconocer el sabor de la canela y parecía gustarle el sabor de esta especia. Canelo es el gato favorito de los niños y ellos juegan mucho con él.
Tigrillo es un gato pardo que parece un pequeño tigre. Es un gato muy tranquilo, cariñoso y dormilón. Camina como un tigre y parece feroz, pero en realidad es un gato dócil. Es un gato grande y robusto. Le gusta que lo acaricien y le gusta recibir atención, pero siempre está tomando una siesta. Tigrillo es el gato favorito de la mamá y el papá de la familia porque es un gato tranquilo y obediente. Siempre se acerca a ellos para que lo acaricien.
El tercer gato de la familia es Gruñón. Le pusieron “Gruñón” porque es un gato que siempre parece estar enojado. Siempre parece que está de mal humor y no le gusta que lo agarren o que lo acaricien. Cuando lo llaman para jugar con él, Gruñón se va en la dirección opuesta. Gruñón solamente va con la familia cuando es la hora de comer. Después de terminar de comer, se va de ahí y continúa su camino. No le gusta jugar con los niños, ni tampoco le gusta que lo toquen mucho. Cuando lo quieren acariciar, algunas veces bufa y se va. Si lo tocan y está de mal humor, se eriza y bufa para que lo dejen en paz. A pesar de ser un gato difícil, muy enojón, muy malhumorado, muy gruñón, la familia no quiere deshacerse de él y le permiten que sea parte de la familia.
Un sábado por la mañana, Adrián, el hijo menor de la familia, jugaba afuera de la casa con su pelota de fútbol. Adrián tiene seis años y es un niño con mucha energía. Le gusta mucho jugar afuera de la casa con su pelota de fútbol. Hay mucho espacio abierto afuera de la casa y puede patear la pelota con todas sus fuerzas en cualquier dirección. No hay casas cerca del patio ni tampoco una carretera con coches, camiones o bicicletas. Es un lugar seguro y no molesta a nadie.
Adrián jugaba con su pelota sin poner atención a su alrededor. El área en donde viven es un lugar que no es peligroso y nunca le ha pasado nada a ningún miembro de la familia. Sin embargo, en ese instante, un animal a la distancia lo observa detenidamente mientras se acerca cuidadosamente hacia el niño. Adrián continúa corriendo y pateando la pelota cuando de repente vio a un perro correr hacia él. Adrián no lo sabía, pero era un coyote que corría hacia él para atacarlo.
En solamente un par de segundos, el coyote llegó hasta donde Adrián estaba y lo mordió en la pantorrilla. Adrián gritó desesperadamente mientras el coyote lo mordía y lo jalaba para tratar de llevárselo. Adrián gritaba y lloraba con todas sus fuerzas. En ese mismo instante, Gruñón llegó a toda velocidad y se lanzó hacia el coyote para defender a Adrián. El coyote soltó la pantorrilla de Adrián y comenzó a pelear con el furioso gato. Gruñón luchaba valientemente con el coyote, pero el coyote pudo atrapar a Gruñón y comenzó a correr con Gruñón en el hocico.
La familia escuchó los gritos de Adrián y los ruidos de Gruñón peleando con el coyote. El hermano mayor de Adrián y su padre salieron rápidamente de la casa y corrieron detrás del coyote para tratar de rescatar a Gruñón. El coyote corría rápidamente con Gruñón en su hocico mientras el padre y el hermano de Adrián lo perseguían muy de cerca. No muy lejos, el coyote soltó a Gruñón y continuó corriendo a toda velocidad para escaparse entre los árboles y las plantas. El padre y el hijo dejaron de perseguir al coyote y tomaron a Gruñón en las manos. El gato estaba mal herido. Tenía sangre en todo el cuerpo y estaba en malas condiciones.
Inmediatamente llevaron al gato al veterinario. La familia estaba muy preocupada por Gruñón. No sabían si el veterinario podría salvar la vida de su querida mascota del ataque del coyote. Gruñón estaba en malas condiciones. Había perdido mucha sangre, pero aún estaba vivo. La familia esperaba pacientemente en la sala de espera y cuando el veterinario finalmente salió para hablar con ellos, les dijo que Gruñón salió bien del tratamiento y que se recuperaría en unos días. Sin embargo, una de sus patitas quedó permanentemente lastimada y ahora Gruñón cojearía al caminar.
La familia se sintió triste de saber que Gruñón cojearía por el resto de su vida, pero la familia estaba contenta de saber que Gruñón pudo sobrevivir al ataque del coyote. La vida les dio una nueva oportunidad para apreciar a su mascota. Gruñón estaba dispuesto a poner su vida en riesgo para proteger a Adrián y todos en la familia estaban agradecidos y conmovidos por la acción de su gato.
Desde ese día, las cosas cambiaron. La familia le daba más atención a Gruñón y lo trataban como un héroe en la familia. Todos en la familia querían acariciarlo más y darle más muestras de cariño, aunque no querían hacer sentir incomodo a su querida mascota. Gruñón también cambió desde ese día. El valiente gato pareció entender el cariño que la familia le tenía y aceptaba que lo acariciaran y aceptaba la atención que recibía de cada miembro de la familia.
By Joel Zárate
Story written by Joel Zárate
Read by Milton Ralph & Alba Sánchez.
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